En los capítulos precedentes he explicado las cosas muy simples y accesibles, pero hay poco aquellos que son capaces de entenderles. Esto son esos que tienen miedo de subir más arriba que su ambiente y hacer los primeros pasos en las Tierras Altas. Pero puedo ver mucho estos todavía que titubea, mucho de ellos piensan de asuntos que suenan en las profundidades de sus consciencias, y estos asuntos turban la paz, y no quiere nadie a contestar a ellos. En vano ellos intentan aprender la verdad, porque las contradicciones evidentes de cosas que instruían a ellos no podían desaparecer de su vista.
Es posible que no exista, por lo menos, otro fenómeno más que fuera puesto por las nubes y precipitado a los más profundos niveles del infierno a la vez. Poco probable que oigas más contradicciones y reticencias alrededor de otro objeto. A veces, el mismo hombre, ya él llama este objeto diversiones carnales o incluso la indisciplina, ya fingidamente y elevadamente lo llama el amor, contradiciéndose de esta manera. Y su astucia es evidente, porque si sabe y dice la verdad, él no se contradiría.
Y tú honestamente ve a recoger todos los conocimientos sobre este objeto que los jueces-hipócritas llaman alegrías carnales, y los "abogados", la mayoría de cuales son hipócritas también, lo llaman el amor. Los últimos de ellos son hipócritas por esa causa que van a manifestarse sobre un objeto sobre cuál ellos mismos no han aprendido todavía, y todas sus palabras son una repetición lo que oían en muchedumbre. Y sucede es beneficioso para tal persona a alabar alguien en uno lugar, y él dice "El amor está entre ellos", pero en otro lugar quiere a manchar alguien con suciedad, dice sobre sus prójimos: "Ellos son libertinos". Más frecuentemente él repite, como un eco, al principio lo que oye aquí, entonces lo que oye allá, y ahora no es difícil de comprender la causa de contradicciones.
Y ten en cuenta que tienes muy buena suerte, si tropiezas un hombre que no evitará las preguntas sobre este sujeto, no mentirá y no fingirá, y si a la vez será encontrado que él sabe el objeto que tú preguntas a él, conviértete en su alumno sin duda.
Sin embargo, ti mismo trata de encontrar la verdad. Cuando recogerás junto todos los pareceres que oías durante toda la vida sobre este objeto, comprenderás que aquí hay algo más que los placeres carnales, porque no hay tantos muchos versos y canciones hermosas que serían escritos sobre la comida, bebida y descanso. Aquí hay algo más y algo superior, pero esta parte elevada no puede estar abierta para aquellos que la reproban y maldicen.
Incluso si aprendes que alguien va a matar otro a cause del celos o va a suicidarse a cause del amor sin respuesta, entonces la razón de eso no es un amor, sino el orgullo, es decir, un miedo por su ego.
Un celoso no defiende su amor, sino el orgullo. Él se venga del hombre, quién, la muchedumbre considera así, le ha hecho un infortunado. Él es sordo y ciego y ha olvidado que incluso los reyes eran víctimas del adulterio.
Otro se siente un infortunado a cause del amor sin respuesta, quiere a suicidarse o simplemente tiene morriña. Él es sordo y ciego también, porque no reflexiona, ni sabe que ama a alguien que no es capaz de amar. Es como si él estime un cadáver, como una persona viva, ha empezado a hablar con ellos, pero el muerto no responde, y él se aflige: ¡"No quieren hablar conmigo, lo significa que no respectan a mí, y soy desgraciado!"
Si supiera alguien que sufre a causa del amor sin respuesta lo que el compañero o la compañera, como si fuera capaz de amar, fue inventada por él mismo (o inventado por ella misma). Incluso si él o ella reciproca y se entrega por el cuerpo, entonces no tendrás más felicidad que del placer carnal ordinario, no será más que de la masturbación. Un placer carnal ordinario puede comprar por dinero, relativamente no grande, y no es necesario de pagar de ningún modo para masturbación, así no hay ningún problema, sino fue imaginado.
Si eres uno a una de aquellos que sabe lo que es el amor, y no obstante, el amor es una antorcha inextinguible de tu alma que ya por sí mismo te hace feliz, y si te has dado cuenta de esto, entonces ya eres feliz. Y no deje apagarse este fuego, porque sólo él solo da una posibilidad a ti de mirar el universo y a lo que es sobre él, completamente de otra manera. Y la extinción de este fuego sería equivalente a alguna precipitación al infierno.
Si llevas la antorcha del amor en tu alma con comprensión, ya puedes ser feliz por sí mismo, estando sin nadie y sin nada. Pero estás en la infancia espiritual, por lo tanto, este juego infantil, es decir el sexo, es necesario para ti. Tu visión espiritual todavía no es fortalecida, por ello un compañero o una compañera es necesaria para ti, para que percibas a través de ellos la belleza del universo y la gloria del Fundador. Todavía no has subido hasta el nivel en las Tierras Altas, donde inmediatamente gustar la belleza del universo, y un mediador es necesario a ti, como un soporte adicional es necesario para aquellos que aprende a caminar. No puedes percibir todavía la plenitud de felicidad, aislándose y mirando las estrellas por la noche clara, ni aspirando la niebla matutina sobre un río y escuchando el canto de los pájaros con acompañamiento de tonada del río que suena. Un médium es necesario a ti para la felicidad completa a quien podrías verter el amor que está y estaba siempre en ti.
Sin embargo, sabe: cuando subes en lo alto suficiente, estos juegos infantiles cesarán de apasionarte. Alguien que adulto y maduro puede interesarse por el juego al ajedrez, pero es poco probable tener éxito a interesarlo por el juego al "Tres en línea". Sin embargo, un bebé no ha estado preparado todavía para el ajedrez, por eso un juego que es más interesante, parece incomprensible y aburrido a él. Aquí porque el Apóstol Pablo había preferido el celibato. Ya él había crecido espiritualmente desde los juegos infantiles que han cesado de interesarlo, pero legaba a los niños espirituales que ellos contraigan matrimonio, diciendo: "sufrirán tribulaciones en su carne que yo quisiera evitarles".
Y no te turbes si tu propia naturaleza te instiga a los juegos insólitos que la sociedad llama perversiones, por supuesto, si estos juegos no traen los frutos males. Porque si escuchas lo que la gente dice, no te pondrás a moverse en tu progreso, no harás incluso un paso en las Tierras Altas. Ello no es Dios, sino la sociedad que es un enemigo del Dios y reprueba todo esto. No obstante, el Señor Jesús instruía de saber un árbol por su frutos. Por ello no te pregunto que haces y cuales juegos tú juegas, sino pregunto ¿cuáles son los frutos de estos juegos? Y si tus juegos no destruyen la vida ni salud de otro, entonces eres hermoso (o hermosa), siendo tal como tú eres, y de hecho sería un pecado si te esforzaras de ser, "como todos", porque Dios no clonaba a la gente, ni creaba los idénticos, sino cada persona está única e irrepetible, y una traición a su esencia no lleva nada, excepto la mentira, el desengaño, la pérdida del objetivo en la vida, porque el objetivo de la vida es el amor.
Alguien de os diría que le gustara jugar a los juegos agresivos y preguntaría, si puede jugar así. Y voy a preguntar una vez más: ¿"cuáles son los efectos de estos juegos"? ¿Es posible que sois estúpidos a tal punto que no diferenciáis entre los moretones y arañazos inofensivos y las heridas mortales y esas que estropean? Y hay tales que van muy lejos, y el límite de cosas permitidas parece vago e indefinido a ellos, y exigen respuesta, cómo determinar claramente eso linde, más allá de cual no se puede penetrar. Voy a contestar a ellos: "Si no podéis determinar el límite preciso entre cosas admisibles e inadmisibles, no acércate a él. Porque sería mejor no alcanzarlo en vez de pasar más allá y llevar los frutos males en el arrebato de pasión. Todo está bien que está en la medida.
Aunque raramente, pero hay alguna gente que es inclinada a los juegos mortales y destructivos. Y voy a revelar para ellos esa verdad que todos los otros escondían de ellos: "tenéis muchas posibilidades de caer muy bajo y encontrarse en el más lúgubre lugar del Desfiladero Hediondo, convirtiéndose en un Asesino en serie de las víctimas inocentes. Sin embargo, alguien que tenga muchas posibilidades de caer muy bajo, él tiene muchas posibilidades de subir muy alto también, convirtiéndose en un gran yogui, y entonces él ya estará cerca de la cima.
No se puede ir por el camino de Tantra en este caso, aceptándose ti mismo tal, cómo eres, sino sólo por el camino del yoga. No estropees tu karma, porque tendrás que expiar por todo esto. Traerás mucha pena y pruebas para cada tu víctima, pero todos estas penas, todas en conjunto, tú llevarás las todas, cómo en esta vida, y en la vida siguiente también. Y en estas pruebas que llevarás su merecido, las incomodidades que sintiera, desistiendo de estas fechorías, parecerían a ti, cómo un paraíso. Te asemejarías a Esaú que había cambiado su primogenitura en la bodrio de lentejas.
Y no te pregunto ¿A cuáles juegos juegas? No obstante, no hagas nadie infeliz. Tus juegos no deben divorciar familias que ya se formadas ni hacer la gente enemigos entre ellos, ciertamente, si aquí no hay ninguna provocación premeditada de riña de los enemigos entre ellos en la guerra sagrada.
La gente a menudo se convierte en infeliz a causa de sus prejuicios. Si has querido un hombre o mujer desde muchedumbre que lleva, cómo las cadenas, varios prejuicios que fueron impuestos por la misma muchedumbre, al principio ayuda a él o a ella a quitarse estos hierros, de desgarrar estas cadenas, para que vaya desde la comunidad que estorba a caminar adelante. Si estimas que es posible, prueba fortuna que liberes al preso de las supersticiones, pero "ni echéis vuestras perlas delante de los cerdos", cómo el gran Profesor había dicho, y no continuaras de los intentos si tus palabras quedaron sin oídas. No podrás querer al muerto, incluso si tú te esfuerzas de hacerlo. En futuro esas fuerzas despertarán le o la que tú no les posees, porque sólo la fuerza de Dios podía resucitar a Lázaro. Abandona el muerto que no puede responder a la efusión de tu alma hasta que él reviva. No amas a él, sino una imagen que has sacado desde la profundidad de tu alma y qué está contigo siempre en alegría y en adversidad, cuando tienes calor y cuando frío.
Y no atribuyas esta imagen de luz a los muertos que se descomponen, porque este amor que siempre yacía en la parte inferior de tu corazón, siempre estaba contigo, siempre estará, y cuando creces espiritualmente, lo aprenderás, pero ahora cree que este fenómeno es divino y puede prescindir de las envolturas corporales.
Y no lo ofendas, acusando ti mismo de la debilidad e indecisión, porque el amor no hace a un hombre débil, incluso contrario: serás fuerte con él, sin miedo, y entonces los tontos y malévolos no te desconcertarán del camino justo. Si has aprendido el amor, pero lo echas, una vez él obedecerá y se irá, y entonces todo el mundo se convertirá en infierno y ningún bien sensual, ni material no podrá consolarte en ese caso. A no ser por las drogas que atonta y despoja la razón temporalmente, después de cuales la realidad parecerá todavía más espantoso.
Si tú has conocido el amor que siempre estaba contigo, guarda él, disfruta de él, agradece el Altísimo a este don de luz, y que este amor te haga oír el Himno, y que él cante, pero la sociedad dentro de ti que calle, porque la feliz y sociedad son incompatibles.
Juega a cualquier juego que te gusta, si él no lleva el malo a alguien, sé libre. En silencio haz tu truco a tu manera, pero sin explicar ante la gente sobre las cosas que ellos no son capaces de comprender, porque han elegido un camino injusto.
Sabe: antes de utilizarte cómo un esclavo o un guerrero en una guerra injusta, la sociedad tiene necesidad de matar el amor en ti. Tal práctica fue tenida ya durante milenios, y la muchedumbre continúa de hacerlo por inercia, una vez incluso sin darse cuenta, para que sonrojarte a causa de la vergüenza errónea, para que provocar los remordimientos falsos, como si lo fuera a causa de la consciencia, pero ello no es una consciencia, sino un miedo bajo de la muchedumbre, ese miedo que no fue aprobado en el Sermón del monte de Christ, cuando Él había dicho: ¡"Ay cuando todos los hombres hablen bien de vosotros"!, pero los sacerdotes e instructores de moral, ellos evitan este punto de la verdad, esforzándose de callar sobre él, siendo hipócritas, frecuentemente ellos hacen buscar una aprobación en la muchedumbre.
Hace tiempo, una vez un conocimiento secreto que el aspecto sexual de la vida contiene una energía enorme, este conocimiento había caído en malas manos, y para utilizar a una persona en sus fines, los defensores de mal, ellos influyen en su aspecto sexual de la vida, usando los prohibiciones falsos, las morales hipócritas, las palabras injuriosas, usando todo esto, obtienen de un hombre de muchedumbre que él expulse el amor desde su corazón.
Ellos ponen barreras y prohibiciones, donde no es necesario, pero el amor no vive en una jaula y vuela fuera desde ella. Así ellos sumen su víctima en el infierno, convirtiendo a ella en un aborto de infierno que serviría fielmente a ellos.
Ama cómo quieres y no tengas miedo de nadie, sin avergonzarse. No lleve los frutos males, ello es la prohibición única. ¡Sé libre! En silencio haz tus trucos, en la medida de lo posible, sin aumentar el número de tus enemigos, porque ellos mismos encontrarían a ti. No sabrían, sino sintieran que no eres un compañero de ellos.
Sé libre, no imite nadie, es un pecado a imitar alguien. Si Dios quisiera, Él te habría hecho semejante a Cristo o a Mahoma, o a Buda, o a Krishna. Sin embargo, no hay repeticiones entre millardos de la gente, entre billones de las criaturas.
Sé libre y juega a cualquier juego, sólo no dañes. Sé libre y sabe defender tu libertad, sabe defender tu amor, sabe defender la fe y la verdad, porque todo eso es desde Dios.
Sé ti mismo y lleva la verdad, donde pueden oírte, pero no te esfuerces a hacer hablar los muertos. Sé ti mismo, ama cómo quieres y cuida el amor en tu corazón, sólo no dañes. Sé ti mismo, examina la verdad y la ciencia eterna de la vida, esto son los soportes, sin cuales caerás. En la medida de lo posible, está en paz con los todos y no ataques, estando primero.
Sabe: si vives, cómo quieres, y no dañas a nadie, sino te atacan, entonces tienes derecho hacer la guerra con ellos, y Dios está en tu lado. Y en este caso tu guerra sería sagrada, y no importa, cuales pérdidas soportaras en esa guerra, todo sería recompensado a ti. No obstante, si sin manera fingida, pero intentaras de agradar a la muchedumbre de hecho, entonces perderás todo y por mucho tiempo.
Es posible que no exista, por lo menos, otro fenómeno más que fuera puesto por las nubes y precipitado a los más profundos niveles del infierno a la vez. Poco probable que oigas más contradicciones y reticencias alrededor de otro objeto. A veces, el mismo hombre, ya él llama este objeto diversiones carnales o incluso la indisciplina, ya fingidamente y elevadamente lo llama el amor, contradiciéndose de esta manera. Y su astucia es evidente, porque si sabe y dice la verdad, él no se contradiría.
Y tú honestamente ve a recoger todos los conocimientos sobre este objeto que los jueces-hipócritas llaman alegrías carnales, y los "abogados", la mayoría de cuales son hipócritas también, lo llaman el amor. Los últimos de ellos son hipócritas por esa causa que van a manifestarse sobre un objeto sobre cuál ellos mismos no han aprendido todavía, y todas sus palabras son una repetición lo que oían en muchedumbre. Y sucede es beneficioso para tal persona a alabar alguien en uno lugar, y él dice "El amor está entre ellos", pero en otro lugar quiere a manchar alguien con suciedad, dice sobre sus prójimos: "Ellos son libertinos". Más frecuentemente él repite, como un eco, al principio lo que oye aquí, entonces lo que oye allá, y ahora no es difícil de comprender la causa de contradicciones.
Y ten en cuenta que tienes muy buena suerte, si tropiezas un hombre que no evitará las preguntas sobre este sujeto, no mentirá y no fingirá, y si a la vez será encontrado que él sabe el objeto que tú preguntas a él, conviértete en su alumno sin duda.
Sin embargo, ti mismo trata de encontrar la verdad. Cuando recogerás junto todos los pareceres que oías durante toda la vida sobre este objeto, comprenderás que aquí hay algo más que los placeres carnales, porque no hay tantos muchos versos y canciones hermosas que serían escritos sobre la comida, bebida y descanso. Aquí hay algo más y algo superior, pero esta parte elevada no puede estar abierta para aquellos que la reproban y maldicen.
Incluso si aprendes que alguien va a matar otro a cause del celos o va a suicidarse a cause del amor sin respuesta, entonces la razón de eso no es un amor, sino el orgullo, es decir, un miedo por su ego.
Un celoso no defiende su amor, sino el orgullo. Él se venga del hombre, quién, la muchedumbre considera así, le ha hecho un infortunado. Él es sordo y ciego y ha olvidado que incluso los reyes eran víctimas del adulterio.
Otro se siente un infortunado a cause del amor sin respuesta, quiere a suicidarse o simplemente tiene morriña. Él es sordo y ciego también, porque no reflexiona, ni sabe que ama a alguien que no es capaz de amar. Es como si él estime un cadáver, como una persona viva, ha empezado a hablar con ellos, pero el muerto no responde, y él se aflige: ¡"No quieren hablar conmigo, lo significa que no respectan a mí, y soy desgraciado!"
Si supiera alguien que sufre a causa del amor sin respuesta lo que el compañero o la compañera, como si fuera capaz de amar, fue inventada por él mismo (o inventado por ella misma). Incluso si él o ella reciproca y se entrega por el cuerpo, entonces no tendrás más felicidad que del placer carnal ordinario, no será más que de la masturbación. Un placer carnal ordinario puede comprar por dinero, relativamente no grande, y no es necesario de pagar de ningún modo para masturbación, así no hay ningún problema, sino fue imaginado.
Si eres uno a una de aquellos que sabe lo que es el amor, y no obstante, el amor es una antorcha inextinguible de tu alma que ya por sí mismo te hace feliz, y si te has dado cuenta de esto, entonces ya eres feliz. Y no deje apagarse este fuego, porque sólo él solo da una posibilidad a ti de mirar el universo y a lo que es sobre él, completamente de otra manera. Y la extinción de este fuego sería equivalente a alguna precipitación al infierno.
Si llevas la antorcha del amor en tu alma con comprensión, ya puedes ser feliz por sí mismo, estando sin nadie y sin nada. Pero estás en la infancia espiritual, por lo tanto, este juego infantil, es decir el sexo, es necesario para ti. Tu visión espiritual todavía no es fortalecida, por ello un compañero o una compañera es necesaria para ti, para que percibas a través de ellos la belleza del universo y la gloria del Fundador. Todavía no has subido hasta el nivel en las Tierras Altas, donde inmediatamente gustar la belleza del universo, y un mediador es necesario a ti, como un soporte adicional es necesario para aquellos que aprende a caminar. No puedes percibir todavía la plenitud de felicidad, aislándose y mirando las estrellas por la noche clara, ni aspirando la niebla matutina sobre un río y escuchando el canto de los pájaros con acompañamiento de tonada del río que suena. Un médium es necesario a ti para la felicidad completa a quien podrías verter el amor que está y estaba siempre en ti.
Sin embargo, sabe: cuando subes en lo alto suficiente, estos juegos infantiles cesarán de apasionarte. Alguien que adulto y maduro puede interesarse por el juego al ajedrez, pero es poco probable tener éxito a interesarlo por el juego al "Tres en línea". Sin embargo, un bebé no ha estado preparado todavía para el ajedrez, por eso un juego que es más interesante, parece incomprensible y aburrido a él. Aquí porque el Apóstol Pablo había preferido el celibato. Ya él había crecido espiritualmente desde los juegos infantiles que han cesado de interesarlo, pero legaba a los niños espirituales que ellos contraigan matrimonio, diciendo: "sufrirán tribulaciones en su carne que yo quisiera evitarles".
Y no te turbes si tu propia naturaleza te instiga a los juegos insólitos que la sociedad llama perversiones, por supuesto, si estos juegos no traen los frutos males. Porque si escuchas lo que la gente dice, no te pondrás a moverse en tu progreso, no harás incluso un paso en las Tierras Altas. Ello no es Dios, sino la sociedad que es un enemigo del Dios y reprueba todo esto. No obstante, el Señor Jesús instruía de saber un árbol por su frutos. Por ello no te pregunto que haces y cuales juegos tú juegas, sino pregunto ¿cuáles son los frutos de estos juegos? Y si tus juegos no destruyen la vida ni salud de otro, entonces eres hermoso (o hermosa), siendo tal como tú eres, y de hecho sería un pecado si te esforzaras de ser, "como todos", porque Dios no clonaba a la gente, ni creaba los idénticos, sino cada persona está única e irrepetible, y una traición a su esencia no lleva nada, excepto la mentira, el desengaño, la pérdida del objetivo en la vida, porque el objetivo de la vida es el amor.
Alguien de os diría que le gustara jugar a los juegos agresivos y preguntaría, si puede jugar así. Y voy a preguntar una vez más: ¿"cuáles son los efectos de estos juegos"? ¿Es posible que sois estúpidos a tal punto que no diferenciáis entre los moretones y arañazos inofensivos y las heridas mortales y esas que estropean? Y hay tales que van muy lejos, y el límite de cosas permitidas parece vago e indefinido a ellos, y exigen respuesta, cómo determinar claramente eso linde, más allá de cual no se puede penetrar. Voy a contestar a ellos: "Si no podéis determinar el límite preciso entre cosas admisibles e inadmisibles, no acércate a él. Porque sería mejor no alcanzarlo en vez de pasar más allá y llevar los frutos males en el arrebato de pasión. Todo está bien que está en la medida.
Aunque raramente, pero hay alguna gente que es inclinada a los juegos mortales y destructivos. Y voy a revelar para ellos esa verdad que todos los otros escondían de ellos: "tenéis muchas posibilidades de caer muy bajo y encontrarse en el más lúgubre lugar del Desfiladero Hediondo, convirtiéndose en un Asesino en serie de las víctimas inocentes. Sin embargo, alguien que tenga muchas posibilidades de caer muy bajo, él tiene muchas posibilidades de subir muy alto también, convirtiéndose en un gran yogui, y entonces él ya estará cerca de la cima.
No se puede ir por el camino de Tantra en este caso, aceptándose ti mismo tal, cómo eres, sino sólo por el camino del yoga. No estropees tu karma, porque tendrás que expiar por todo esto. Traerás mucha pena y pruebas para cada tu víctima, pero todos estas penas, todas en conjunto, tú llevarás las todas, cómo en esta vida, y en la vida siguiente también. Y en estas pruebas que llevarás su merecido, las incomodidades que sintiera, desistiendo de estas fechorías, parecerían a ti, cómo un paraíso. Te asemejarías a Esaú que había cambiado su primogenitura en la bodrio de lentejas.
Y no te pregunto ¿A cuáles juegos juegas? No obstante, no hagas nadie infeliz. Tus juegos no deben divorciar familias que ya se formadas ni hacer la gente enemigos entre ellos, ciertamente, si aquí no hay ninguna provocación premeditada de riña de los enemigos entre ellos en la guerra sagrada.
La gente a menudo se convierte en infeliz a causa de sus prejuicios. Si has querido un hombre o mujer desde muchedumbre que lleva, cómo las cadenas, varios prejuicios que fueron impuestos por la misma muchedumbre, al principio ayuda a él o a ella a quitarse estos hierros, de desgarrar estas cadenas, para que vaya desde la comunidad que estorba a caminar adelante. Si estimas que es posible, prueba fortuna que liberes al preso de las supersticiones, pero "ni echéis vuestras perlas delante de los cerdos", cómo el gran Profesor había dicho, y no continuaras de los intentos si tus palabras quedaron sin oídas. No podrás querer al muerto, incluso si tú te esfuerzas de hacerlo. En futuro esas fuerzas despertarán le o la que tú no les posees, porque sólo la fuerza de Dios podía resucitar a Lázaro. Abandona el muerto que no puede responder a la efusión de tu alma hasta que él reviva. No amas a él, sino una imagen que has sacado desde la profundidad de tu alma y qué está contigo siempre en alegría y en adversidad, cuando tienes calor y cuando frío.
Y no atribuyas esta imagen de luz a los muertos que se descomponen, porque este amor que siempre yacía en la parte inferior de tu corazón, siempre estaba contigo, siempre estará, y cuando creces espiritualmente, lo aprenderás, pero ahora cree que este fenómeno es divino y puede prescindir de las envolturas corporales.
Y no lo ofendas, acusando ti mismo de la debilidad e indecisión, porque el amor no hace a un hombre débil, incluso contrario: serás fuerte con él, sin miedo, y entonces los tontos y malévolos no te desconcertarán del camino justo. Si has aprendido el amor, pero lo echas, una vez él obedecerá y se irá, y entonces todo el mundo se convertirá en infierno y ningún bien sensual, ni material no podrá consolarte en ese caso. A no ser por las drogas que atonta y despoja la razón temporalmente, después de cuales la realidad parecerá todavía más espantoso.
Si tú has conocido el amor que siempre estaba contigo, guarda él, disfruta de él, agradece el Altísimo a este don de luz, y que este amor te haga oír el Himno, y que él cante, pero la sociedad dentro de ti que calle, porque la feliz y sociedad son incompatibles.
Juega a cualquier juego que te gusta, si él no lleva el malo a alguien, sé libre. En silencio haz tu truco a tu manera, pero sin explicar ante la gente sobre las cosas que ellos no son capaces de comprender, porque han elegido un camino injusto.
Sabe: antes de utilizarte cómo un esclavo o un guerrero en una guerra injusta, la sociedad tiene necesidad de matar el amor en ti. Tal práctica fue tenida ya durante milenios, y la muchedumbre continúa de hacerlo por inercia, una vez incluso sin darse cuenta, para que sonrojarte a causa de la vergüenza errónea, para que provocar los remordimientos falsos, como si lo fuera a causa de la consciencia, pero ello no es una consciencia, sino un miedo bajo de la muchedumbre, ese miedo que no fue aprobado en el Sermón del monte de Christ, cuando Él había dicho: ¡"Ay cuando todos los hombres hablen bien de vosotros"!, pero los sacerdotes e instructores de moral, ellos evitan este punto de la verdad, esforzándose de callar sobre él, siendo hipócritas, frecuentemente ellos hacen buscar una aprobación en la muchedumbre.
Hace tiempo, una vez un conocimiento secreto que el aspecto sexual de la vida contiene una energía enorme, este conocimiento había caído en malas manos, y para utilizar a una persona en sus fines, los defensores de mal, ellos influyen en su aspecto sexual de la vida, usando los prohibiciones falsos, las morales hipócritas, las palabras injuriosas, usando todo esto, obtienen de un hombre de muchedumbre que él expulse el amor desde su corazón.
Ellos ponen barreras y prohibiciones, donde no es necesario, pero el amor no vive en una jaula y vuela fuera desde ella. Así ellos sumen su víctima en el infierno, convirtiendo a ella en un aborto de infierno que serviría fielmente a ellos.
Ama cómo quieres y no tengas miedo de nadie, sin avergonzarse. No lleve los frutos males, ello es la prohibición única. ¡Sé libre! En silencio haz tus trucos, en la medida de lo posible, sin aumentar el número de tus enemigos, porque ellos mismos encontrarían a ti. No sabrían, sino sintieran que no eres un compañero de ellos.
Sé libre, no imite nadie, es un pecado a imitar alguien. Si Dios quisiera, Él te habría hecho semejante a Cristo o a Mahoma, o a Buda, o a Krishna. Sin embargo, no hay repeticiones entre millardos de la gente, entre billones de las criaturas.
Sé libre y juega a cualquier juego, sólo no dañes. Sé libre y sabe defender tu libertad, sabe defender tu amor, sabe defender la fe y la verdad, porque todo eso es desde Dios.
Sé ti mismo y lleva la verdad, donde pueden oírte, pero no te esfuerces a hacer hablar los muertos. Sé ti mismo, ama cómo quieres y cuida el amor en tu corazón, sólo no dañes. Sé ti mismo, examina la verdad y la ciencia eterna de la vida, esto son los soportes, sin cuales caerás. En la medida de lo posible, está en paz con los todos y no ataques, estando primero.
Sabe: si vives, cómo quieres, y no dañas a nadie, sino te atacan, entonces tienes derecho hacer la guerra con ellos, y Dios está en tu lado. Y en este caso tu guerra sería sagrada, y no importa, cuales pérdidas soportaras en esa guerra, todo sería recompensado a ti. No obstante, si sin manera fingida, pero intentaras de agradar a la muchedumbre de hecho, entonces perderás todo y por mucho tiempo.
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